Citas Anarquistas
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Marius Jacob

Marius Jacob, el anarquista sin escrúpulos

Nacido el 29 de octubre de 1879 en Marsella, Francia, Marius Jacob es reconocido por ser un revolucionario anarquista francés y un habilidoso criminal. De joven, fue capturado y condenado a servir en el ejército, sin embargo, logró escapar y pasar a la clandestinidad. Durante su tiempo como fugitivo, fue influenciado por las ideas de anarquismo e ilegalismo, que defienden que el crimen puede ser una forma de protesta política y un medio para la revolución.

Murió el 28 de agosto de 1954 en Reuilly, Francia. A lo largo de su vida, Jacob participó en unas 150 operaciones ilegales, que incluían robos y saqueos a la burguesía y a la iglesia. Sus acciones y su desafío al estado y al sistema capitalista lo convirtieron en una figura emblemática para el movimiento anarquista. Su vida y pensamientos continúan siendo relevantes para los anarquistas de la actualidad, y su vida como criminal anarquista se ha convertido también en tema de varios libros y películas.


Fecha de nacimiento: 29 de octubre de 1879

Fecha de Décès: 28 de agosto de 1954

País de origen: Francia

Idéologías políticas: Anarquismo Ilegalista

Citas Disponibles: 4



Citas de Marius Jacob

El robo es la restitución, la recuperación de la posesión. En lugar de estar enclaustrados en una fábrica, como en una colonia penal; en lugar de mendigar por lo que tenía derecho, preferí rebelarme y luchar cara a cara contra mi enemigo haciendo la guerra a los ricos, atacando sus bienes.
Muy joven me inocularon el virus de la justicia y me ganó muchos problemas.
Para destruir un efecto primero debes destruir la causa. Si hay robo es sólo porque hay abundancia por un lado y hambre por el otro; porque todo sólo es de algunos. La lucha sólo desaparecerá cuando los hombres pongan en común sus alegrías y sufrimientos, sus trabajos y sus riquezas, cuando todo sea de todos.
Los que producen todo no tienen nada y los que no producen nada lo tienen todo. Tal estado de cosas sólo puede producir antagonismo entre la clase trabajadora y la clase propietaria, es decir, la clase que no hace nada. Estalla la lucha y el odio asesta sus golpes.